El Pozo de la Ascensión ~ Brandon Sanderson

16.6.17

The Well of Ascension · Brandon Sanderson
Mistborn #2
Nova · 2016
784 páginas
ISBN 9788466658904
El Imperio Final · El Pozo de la Ascensión · El Héroe de las Eras
Durante los últimos mil años, han caído las cenizas y nada florece. Durante mil años, los skaa han sido esclavizados y han vivido sumidos en un miedo inevitable. Durante mil años, el Lord Legislador ha reinado con un poder absoluto gracias al terror y a su divina invencibilidad por la poderosa magia de la "alomancia". Pero vencer y matar al Lord Legislador fue la parte sencilla. El verdadero desafío lo constituirá sobrevivir a las consecuencias de su caída. Tomar el poder tal vez resultó fácil, pero ¿qué ocurre después? ¿Cómo se usa el poder?

Comentario personal

Contiene spoilers de El Imperio Final

Ay, Sandy, qué bien sabes ganarte el afecto del lector. Si han leído mis reseñas de otras novelas del autor, sabrán que Brandon Sanderson me está conquistando y transformándose a pasos agigantados en uno de mis autores predilectos. Aunque no llega al nivel de la diosa Robin Hobb, Sanderson saben cómo contar una historia de manera tal que en ningún momento resulte aburrida, a pesar de que sus obras “adultas” sobrepasen fácilmente las 600 o 700 páginas.

No soy una buena persona, ni una mala persona. Solo estoy aquí para matar.

El Pozo de la Ascensión, como si fuera poco, es un libro con un planteamiento ya extraño de por sí, debido a lo que ocurre en el primer libro. Cuando un autor se hubiera quedado con la trama de El Imperio Final y la hubiese separado en 2 o 3 libros, Sanderson cierra un ciclo en la primera parte de la saga Mistborn, y en la segunda nos plantea una situación compleja: ¿qué sucede después de derrocar a un dios?

Vin y compañía no lo tienen fácil; sin Kelsier para liderar la banda y allanar el camino, Luthadel se sumerge rápidamente en el caos. Es así que El Pozo de la Ascensión se convierte, por un lado, en una magistral jugarreta política a cuatro bandas, y, por otro, se centra en las interminables dudas de Vin y su rol en el mundo que la rodea.


Este segundo libro introduce a personajes nuevos, y cada uno aporta con un granito de arena a la guerra que se cuece en Luthadel. Zane, un nacido de la bruma enemigo, reflejará una parte de la conciencia de Vin; Tyndwil será la maestra de Elend Venture en su camino a convertirse en líder; Straff Venture será el antagonista contra el que Vin y compañía tendrán que enfrentarse si quieren que Luthadel no se convierta en una ciudad muerta.

Destaco al kandra OreSeur, un personaje que me encantó y que definitivamente necesito leer en El Héroe de las Eras, especialmente por los misterios que lo envuelven y su personalidad atrayente, y Sazed, quien obtiene mucho más protagonismo en esta continuación.

Al igual que con El Imperio Final, la trama de El Pozo de la Ascensión se construye lentamente. Sanderson no apresura las cosas; deja que todo tome su lugar antes de que el argumento se vaya al carajo. Es algo que me gusta de este autor: juega con el lector, dando pistas, llevándonos para allá y para acá hasta que se van juntando todas las piezas del rompecabezas y logramos ver hacia dónde nos dirigimos.

Es… como si las cosas volvieran a repetirse. Así que… tal vez eso significa que el Héroe de las Eras tendrá que venir de nuevo.

Sin embargo, algo que lo pone por debajo de El Imperio Final es el uso de ciertos clichés que no esperaba encontrar en la obra de un autor tan alabado y reconocido. Zane, personaje introducido a la fuerza, es un recurso ya visto y luego desperdiciado. En el final, como si fuera poco, ocurre algo que me pareció una solución demasiado fácil y sé que me va a molestar en El Héroe de las Eras. También se le pudo sacar más partido a los personajes secundarios como Brisa o a los antagonistas como Cett y Straff.

El Pozo de la Ascensión es, en definitiva, una continuación digna, con buena narrativa, personajes bien construidos, y sobre todo una novela en que nada es lo que parece.

Si les gusta la fantasía, tienen que leer esta trilogía sí o sí.


Gracias a Ediciones B por el ejemplar para esta reseña.

Diabólica ~ S.J. Kincaid

4.6.17

The Diabolic · S.J. Kincaid
The Diabolic #1 (de 3)
Alfaguara · 2017
430 páginas
ISBN 9789877383317
Una diabólica es implacable.
Una diabólica es letal.
Una diabólica tiene un solo fin:
matar para proteger a su dueño.
Némesis es una diabólica: un arma letal con aspecto humano. Ha sido creada para proteger a Sidonia, la hija de un senador galáctico. Aunque se han criado juntas, Némesis sabe que no pueden ser amigas ni iguales: su único propósito es defender a su dueña a vida o muerte.
Cuando el emperador se entera de que el padre de Sidonia está tramando una rebelión, la llama a la corte para tenerla de rehén. Solo hay una manera de protegerla: Némesis debe ir en su lugar y hacerse pasar por ella.
Rodeada de peligros, intrigas y traiciones, Némesis deberá ocultar quién es en realidad justo cuando empieza a descubrirlo.
En el universo de Némesis todo es posible: el riesgo, la aventura, el peligro... incluso el amor.

Comentario personal

Cuando leí la sinopsis de este libro me dije que le iba a dar una oportunidad, principalmente porque me llamaba mucho la atención que estuviese centrado en una criatura humanoide y todos los dilemas existenciales que se explorarían. Por alguna razón, me recordaba a Cinder (salvando las diferencias obvias). Así que me puse a leerlo… y me encontré con un bombardeo de información sobre este mundo inicialmente complejo, pero bastante ligero si lo miramos con lupa.

Diabólica se desarrolla en un futuro muy lejano, cuando los seres humanos han conquistado el universo y pueden viajar en el hiperespacio. Las distancias ya no se miden en kilómetros sino que en años luz, y viajar a otro país es en realidad viajar a otro planeta. El líder de esta sociedad es el emperador Domitrian, y sus súbditos, los nobles del imperio, se conocen como grandilocuentia. Para proteger a estos nobles se han diseñado humanoides conocidos como diabólicos, que sobrepasan en fuerza, velocidad y otras habilidades físicas y psicológicas a los humanos con tal de convertirse en sus feroces protectores.

Miré a la niña que tenía ante mí, y algo nuevo se despertó en mi interior, una sensación que no había tenido nunca.
Ahora tenía un constante rugido dentro del cráneo, cambiándome, modificándome.
Quería ayudar a aquella niña. Quería protegerla.

Némesis es una diabólica vinculada artificialmente a Sidonia, la hija del senador Impyrean, un noble rebelde ya no que sigue las ideologías y religión helionista impuestas por el emperador. Aunque todos en casa de los Impyrean ven a Némesis casi como un objeto peligroso, Sidonia es una amiga para Némesis, y la insta a explorar lo que ella llama “humanidad”, algo contra natura para un diabólico. El destino de ambas se tuerce cuando el emperador solicita la presencia de Sidonia como castigo por las afrentas de su padre y, para protegerla, Némesis va en su lugar.

¿Saben cuál es mi principal problema con este libro? La narración en primera persona. Se suponía que yo iba a conocer a una especie de robot (si lo miramos fríamente), y por tanto, al estar narrado en primera persona debía resultar chocante porque estaría leyendo a una criatura sin emociones. Se suponía que su narrativa debía ser muy distinta a la de un ser humano promedio. Y… me encontré con una adolescente. NOPE. Demasiado humana para mi gusto. Una contradicción en toda regla, desde principio a fin. Sobre todo al final.

Como si fuera poco, Némesis pasa de ser una arma en toda regla —porque sí, hay varias muertes en este libro— a una chica hormonal que cae en las redes de… ya lo pueden imaginar. Yep, eso mismo. ¿No me creen? Inserten aquí el bien ponderado y nunca mal usado amorsh. Nop, no estoy spoileando a nadie porque ¿qué autor se arriesgará algún día a escribir un YA sin que el amor tenga que ser la solución a todos los problemas de la humanidad? (Y los no-humanos, ya que estamos).

Quería gritar. Me ascendía por la garganta el grito cegador de la ira contra un destino que decía que yo valía muy poco, que todo cuanto era y sentía no era más que un apéndice de un ser humano real.

Tampoco le perdono a la autora que haya desperdiciado a sus personajes en general. Sidonia, Tyrus, Cygna, todos tenían mucho potencial, pero se los come la velocidad con que transcurren las cosas. Insisto con el tema del punto de vista; una narración en tercera persona hubiese ayudado mucho más, sobre todo a la hora de explorar las maquinaciones de Cygna, que parecen sacadas de la nada. El brillante juego de estrategia de Tyrus también pudo haberse lucido más, pero bueno, es lo que hay.

¿Qué me convenció? Pues que aunque me costó mucho conectar, hacia la mitad me enganché y luego leí velozmente hasta la última página. De otra manera, el libro habría sido un suplicio (y que, de hecho, es lo que pensaba hasta la página 200).

¿Lo recomiendo? Sí, pero sólo si no has leído muchas distopías. De otra manera, te puede parecer similar a las demás. Némesis por suerte no es odiosa, pero el desarrollo de la historia no está bien llevado, y eso es un pecado para una idea que pudo haber sido grandiosa en unas manos más capaces.


PD: Convertir este libro autoconclusivo en una trilogía es un error del porte de un buque.
PD2: SPOILER Me hubiese gustado mucho que el libro acabara con una masacre perpetrada por Némesis. Que la hubiese consumido la emoción de perder a Sidonia y hubiese matado a todos en la escena final. Que aceptase vivir al lado de Tyrus, incluso con sus dudas, fue muy forzado. En cambio, una última escena sangrienta… uff, bestial. FIN SPOILER

Gracias a Penguin Random House por el ejemplar para esta reseña.